Mónica López Bordón es periodista y vive en Madrid (España). A sido galardonada con el Premio Internacional de Poesía Ángel Miguel Pozanco 2009 y el Premio Nacional Hernán Esquío 2006. "LA POESÍA NO TIENE EDAD" (El Indio del Jarama).
LA TERCERA PREGUNTA
En tu melodiosa desnudez
escribo el estallido que no te abandona:
¿cómo escapar?
Luz y pregunta
en tu cabeza acostumbrada
a la rebeldía del cabello
ondeando los misterios del mundo.
Tiene el alma su división
iluminada en heliotropos abiertos
que partirán mañana
como si fuera la última lluvia,
la última gota abrazando
la respiración de la noche.
Vuelan las gaviotas
y nadie responde
en el fondo de mi garganta.
SI LA VOZ SE SINTIERA CON LOS OJOS
Tocas en mis costados
el laberinto y todas sus sendas
ceñidas al color de tu voz
y al tacto ondulado de tu vista.
Si la voz se sintiera con los ojos,
cáliz desquitado en las carcajadas anegadas
del llanto vacío de hoy, del día que se acaba.
Atiéndeme, se va mi fuerza haciendo nube,
te miro y no llego, amor en las palabras.
Te digo: espérame…
cuando ya, otro rostro, nos sonríe.
TRAEDME UNA HORA QUE VIVIR
Traedme una hora que vivir
y será ese encuentro decoroso
con el tiempo sin sus letras
sin su tiempo alumbrado
en la conversación
de la página en blanco
abierta, humana, desnuda,
ligera, en sus propios límites.
Traedme una hora que vivir
y volaré en el poema
como paloma de alas infinitas
ascendiendo al universo
en busca de alguna verdad.
Traedme mi cuerpo apasionado,
un beso mío que arda
en la piel entregada, embriagada
en tu boca de fuego.
Traedme una hora que vivir.
La viviré en la palabra
acariciada por los labios
en todas sus sílabas brotando
como el río que nace sin detenerse.
Una mujer mira al mundo
sin miedo
y le hace temblar.
¿SERÁS, AMOR, UN LARGO ADIÓS QUE NO SE ACABA?
Se asoma a los labios la voz que te nombra
desde nadie.
¿Serás, amor,
un largo adiós que no se acaba?
Me pregunto, te pregunto
Íntima
desde el otro lado de la muerte.
Llegas palpitando con tu carne de viento.
¿Adónde ir?
¿De dónde sale esa mirada
alta marea
sin lógica aritmética
pero con todos sus aromas?
Sostiene la mano tus pasos distraídos,
iris de piel nocturna
en anónimo diálogo de nostalgia.
Te pondría distancia y olvido.
Juega mi corazón con el misterio del verbo
que se desnuda, amor, tan lejano en tu adiós.
ESTÁN LAS ROSAS ABRIÉNDOSE EN TUS MANOS
Están las rosas abriéndose en tus manos,
llenándose de sí mismas
delicada forma la de sus ojos serenos
emergiendo
sostenidos
en la madre de todo silencio.
Dobla el verso la esquina
y se muerden en los labios
con la punta de los dedos.
Distribuye la soledad y deja
de existir. Brotan las flores.
Abandono la fórmula de la memoria
y los perfiles de las sombras
dibujados para nadie.
Me entrego a la noche
me río, me incorporo,
me rebelo
buscándote siempre.
INVIERNO DE LOS MIL COLORES
Le repite la historia como si fuera la primera vez:
ya no serás la luna y la muerte,
la risa y el alba
los cinco números
con todos sus puntos cardinales,
el sur y el oeste
con sus colores y sus sombras.
Ya no serás.
El día ha comenzado.
No supe ver y mi mano
cae, muerte abajo,
sin distancia.
Miro desde todos los lugares que amo,
inmensos
en los inacabables ojos del mundo.
Solivianto el eco de la noche,
su nudo en la garganta,
quiero huirla, desvencijarla
en el inevitable encuentro:
la muerte con la muerte
vencidas.
Comentarios
Muchas gracias por la entrada. Es una alegría compartir aquí poesía.
Un beso grande
Mónica
Besos!